MANUEL MORI PAREDES RECTOR DE LA UNAC FUE VACADO

Por fin, las actividades impropias del “clan”, “la gran familia”, y otros “ayayeros” ha llegado a su fin. El pasado lunes 3 del presente, la Asamblea Universitaria por Mayoría, decidió declarar la vacancia en el cargo de Rector UNAC de Manuel Mori Paredes. Tanto trapicheo, descrédito de la función académica, corrupción, malversación de fondos públicos y la creciente reprobación estudiantil, son los motivos de la histórica decisión.

Son más más de 20 profesores, entre Decanos, Secretarios Académicos y “otros principales” que  están encausados, imputados y condenados por delitos de prevaricación, cohecho, malversación, apropiación indebida, administración desleal, acoso, tráfico de influencias, falsedad en documento público o abuso de poder. La continua cascada de nuevas revelaciones permite augurar que todavía quedan “profesores” corruptos que permanecen ocultos y silenciados por sus vínculos amicales con algunos miembros de la actual Asamblea Universitaria. He visto casi todo. Desde el chismoso y sobón hasta el “profesor delincuente” que cobra por una nota aprobatoria, pasando por la mayoría de profesores “agua tibia”, siempre dispuestos a agachar la cabeza, a saludar, o besar las manos del Rector en cada ceremonia, o aniversario.

Este triunfo, trataré de enmarcarle con una oración que escuche a mi amigo César Guevara Díaz Profesor de la FCA – UNAC: «El trigo se limpia con el viento, como el pecado se limpia con el castigo». Son casi tres años de transgresión sistemática de todas las normas académicas, mercantiles y de convivencia, con viajes de placer a Centroamérica, junto a la extralimitación de la codicia y las bajas pasiones.  Morí y su pandilla desprestigió y dinamitó la UNAC. Los profesores de la UNAC  que respetan la ley, nunca olvidaran estos años.

El rastro de la corrupción resulta difícil de ocultar. Se ha conocido que la cúpula corrupta está siendo investigada por la Contraloría por desviación de fondos que, al parecer, han sido destinados a actividades ajenas a los fines para los que habían sido concedidos. No es la primera vez que se conocen irregularidades con subvenciones para estudios de Maestrías “chicha”, piden para estudiar en la Universidad del Pacífico, cuando en realidad están matriculados en la de Huacho.

 También es el momento de condenar la actitud cómplice de la ANR. A ésta entidad nunca le importó que la UNAC sea un bastión de la corrupción, no auditable. Nunca ejerció su facultad prevista en el artículo 86° de la vigente Ley Universitaria, para ordenar auditorías destinadas a velar por el correcto uso de los recursos de las universidades.

A la caída de Mori, debe seguir la desaparición de la Asociación de Docentes de la UNAC, esta entidad siempre fue el alcahuete de los corruptos, amparó la endogamia y el amiguismo en las Facultades. El Rector y sus Decanos, son miembros activos de esta asociación.  Por eso nos produce risa y vergüenza ajena, la supuesta defensa de los intereses de los docentes agremiados y de la autonomía universitaria que pregona. La mayoría de sus directivos, pertenecen al entorno de Manuel Mori, algunos con procesos judiciales, otros tienen antecedentes penales por terrorismo, y muchos están al borde de la jubilación. Entonces… ¿por qué no se largan? no tienen nada que perder, sólo sus privilegios;  o tal vez esperan otra cosa.

Finalmente, nuestro reconocimiento y gratitud a los profesores, Hernán Ávila Morales, César Guevara Díaz, Marco Guerrero Caballero, Egard Pintado Pasapera  y los alumnos del tercio de la FCA, por iniciar la guerra. A José Ruiz Nizama, Secretario de SINDUNAC, por su colaboración en el levantamiento de información en todas las Facultades; y al Profesor Jorge Montaño Pisfil por su decidida labor al frente de la Tri-Estamental, toda una artillería que líquido a la “gran familia”.